miércoles, 27 de febrero de 2019

El Dragón Rojo y la reina

Ilustración autoría del artista mantense Gant.









El Dragón Rojo venció y exterminó el ejército más poderoso que ha existido, un imperio que se había convertido en el terror de sus enemigos. Drákon entró al castillo derrumbando sus murallas e incendiándolo, tratando de buscar a la princesa Áurea para secuestrarla. Al no encontrarla se airó que fuego de su boca sopló, y quemó todo a su paso. Desesperado miró entre escombros y descubrió que la reina Licinia yacía ahí. 

— Qué exquisita carne he descubierto, no sabes cómo la he deseado, me deleitaré con ella al destriparla mientras la mastico y me sacio con su sangre. Dijo la bestia roja. 

La esposa del rey se había resignado con lo que iba a suceder, su marido fue derrotado por este enemigo legendario que ahora pensaba en comerla.

— ¡Maldito dragón! Algún día habrá un guerrero que te vencerá, destruirá y se vengará por todas las personas inocentes que has asesinado. Cuando suceda eso, podré descansar en paz. Palabras de una mujer con fe de lo que decía.

— No moriré mujer desdichada. ¡Nadie me derrotará maldita humana! –Dijo el aniquilador de hombres. Drákon la agarró con su boca atravesándole sus colmillos en el cuerpo chispeando sangre y cayendo algunas partes de sus extremidades, en especial su cabeza; y es entonces, que usa la magia con el fin de usurparse las hermosas perlas, diamantes y tesoros del reino de Abdón, el defensor del pueblo, el hombre justo, humilde y poderoso. Cuando este aniquiló al reino igual se sentía frustrado por no haber capturado a la princesa, y sin perder tiempo decidió liberar de la Tierra del Olvido a una bruja híbrida con torso de mujer y cuerpo de león, su nombre era Sydra. Una fiera que perturbó la tranquilidad de las familias aldeanas al raptarles a sus hijos recién nacidos y comérselos. Obedeció a su amo al ordenarle que buscase a la hija del rey y se la trajera viva porque necesitaba cumplir con el ritual que lo convertiría en un ser inmortal. 
(Fragmento de la novela Leyendas de un fauno, de reciente publicación)


lunes, 4 de febrero de 2019

Análisis de Sandra Chávez




Sandra Chávez Montalbán, ensayista literaria, fue la encargada de analizar mi novela en su primera presentación, realizada en Manta el viernes 1 de febrero. Comparto con ustedes unos fragmentos de su texto crítico:


“Carlos Coello con Leyendas de un fauno explora una de las formas literarias más remotas, la mítica, de esta manera se introduce en la literatura fantástica, que en las letras manabitas ha sido casi nula su incursión.
Carlos Coello apuesta por el retorno de lo antiguo, de lo fantasioso, de lo romántico y mitológico. Fauno, princesa, reyes, dioses, dragones, gladiadores, bestias, se res híbridos, brujas y varios seres mitológicos son el arsenal de personajes que utiliza el autor en la puesta en escena, sin faltar la magia, poderes y hechizos como los ingredientes perfectos para que la fantasía llegue a su máximo esplendor”.   

domingo, 3 de febrero de 2019

Un fauno empieza su recorrido


La noche del viernes 1 de febrero se realizó la primera presentación de mi novela Leyendas de un fauno. Solo me queda agradecer a todos los que se acercaron hasta La Caverna para compartir este inicio de una trilogía con la que he soñado desde 2014.

Esta primera parte ha quedado muy sobresaliente, sea por la edición de mi casa editorial, por los aportes del artista Xavier García, tanto en el arte de la portada como las ilustraciones que constan en el interior del libro.

Gracias a Sandra Chávez por su análisis en torno a la novela, que bueno es saber que hay en Manta ensayistas de su talla que saben leer una obra literaria. 

Ya se están coordinando las próximas presentaciones que incluyen (dentro de Manabí) a las ciudades de Portoviejo y Santa Ana. 

Las fotos de este post las he tomado de la cuenta de mi casa editorial Tinta Ácida y son de Joselo Márquez.



Sandra Chávez leyendo su análisis.

Lectoras interesadas en la historia de el fauno.

Junto a mis editores.